A la Hora del Almuerzo, Cuando Todos…
Published by Daniel Agustín Hassan under on 18:33
Había una vez una vida arruinada. Salió tarde de su trabajo para ir a almorzar. Al finalizar, y viendo que era temprano, se sentó en la plaza y lloró. Pero tuvo que parar pronto ya que se le terminaban sus reservas lacrimógenas. Allí, sin tener nada mejor que hacer, hecho un vistazo a su alrededor y le dijo a un árbol:
--¿Yo? Pobre vos, por lo menos yo soy libre.
Tomó su portafolio y encaró para la oficina.
--¿Yo? Pobre vos, por lo menos yo soy libre.
Tomó su portafolio y encaró para la oficina.
2 comentarios:
libre no significa poder trasladarse, de todas formas la vida arruinada es presa de este sistema. ¿quien es libre ahora? ¿AH?
ta weno iwal
nags.
esa es la joda nags jajaja
Publicar un comentario